Las partituras para flauta te serán vitales. Sobre todo, cuando vayas a interpretar con este instrumento de viento. Puedes usarlas como guía, registro o medio para interpretar diversas piezas musicales.
Asimismo, pueden serte muy útiles para ser analizadas. Puedes hacerlo con el objetivo de conocer aspectos musicales adicionales. Estos pueden servirte para ejecutar las piezas de una manera mucho más fiel con respecto a cómo fueron concebidas. De hecho, muchos músicos expertos han demostrado que con esos estudios puede conseguirse información muy confiable a ese respecto.
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¿Para qué te sirven exactamente las partituras para flauta?
Como seguramente ya sabes, las partituras son un documento en el que está indicado cómo deben de ser interpretadas las piezas musicales. Se hace a través de un lenguaje único, creado con el objetivo de que los compositores puedan comunicarse entre sí.
Las partituras permiten que el compositor sepa cosas como el tono en el que debe llevarse a cabo la melodía. Por supuesto, si tú, como flautista, dominas tanto la lectura como la escritura de las notas musicales, mejorará mucho tu habilidad. Así serás capaz de tocar cualquier nota que desees.
En las partituras se te indicará el tono en el que tienes que efectuarlas, así como el nombre de la nota que debes tocar y hasta la duración del tono. Con una buena partitura, el proceso de ejecutar cualquier pieza con la flauta será un proceso sencillo y muy intuitivo.
La estructura de las partituras
Toda la estructura de estas partituras para flauta está expresada, como seguramente ya sabes, en un pentagrama. Por muy mínimamente que estés interesado en la música, es casi seguro que habrás escuchado o leído más de una vez esa palabra.
Como hemos dicho, seguramente ya lo sabes, pero para ser más específicos, un pentagrama es un conjunto de 5 líneas horizontales paralelas. Sobre ellas se escriben las notas musicales que tan bien conoces y los diferentes signos de notación.
Algunos signos musicales
Dentro de los signos musicales está el pentagrama, del que acabamos de hablarte. Pero hay más. Vamos a ver algunos de los principales. Lo cierto es que estos signos son imprescindibles tanto para crear como para ejecutar piezas musicales.
Al igual que pasa en otro tipo de materias, también hay normas y estructuras que hay que comprender para dominar todo lo preciso correctamente.
Notas
Estas es otras de las cosas que seguro que conoces. Seguro que te las incultaron en el colegio desde muy temprana edad: Do-Re-Mí-Fa-Sol-La-Sí-Do. Si no, puede que fueran Julie Andrews y su película «Sonrisas y lágrimas» («La novicia rebelde») los encargados de hacértelas conocer.
Estos 7 sonidos son los símbolos de la escala diatónica. Son fundamentales para la música. Con ellas se determinan el ritmo y los silencios; una parte imprescindible de las canciones.
Figuras
Son las encargadas de determinar la duración de los sonidos que emite la flauta, así como de los silencios y de las pausas momentáneas. Cada una de las figuras tiene su correspondiente silencio. Al igual que las notas, las figuras también son 7. Su organización de es de mayor a menor: entre redonda, blanca, negra, corchea, semicorchea, fusa y semifusa.
Silencios
Son las pausas que hay entre cada pieza musical. A veces pueden definirse como nota nula o como nota sin ejecución. Estos silencios musicales sirven, por ejemplo, para ayudar al descanso entre frases, en estas pausas no se escucha nada.
Alteraciones
Símbolos gráficos que están ubicados a la izquierda de las notas musicales. Son las encargadas de cambiar la altura de la nota, indicándoles si tienen que subir o bajar medio tono o uno entero. Todo será en función del símbolo que aparezca. Estos son:
- Sostenido
- Doble
- Bemol
- Doble bemol
- Becuadro
Signos de repetición
Son marcas y signos que se utilizan para evitar el tener que repetir compases que se repiten de la misma forma en la que ya están escritos. Así se logra que la partitura no sea demasiado extensa.
Calderón
Tanto su duración como su extensión son libres. También se le llama fermata o corona. Fundamental para prolongar el silencio o la duración de manera indefinida. En cuanto a su colocación, se pone arriba y debajo del silencio o de la nota. Así se extiende instantáneamente.
Ligaduras
Es una línea curva que une una nota y otra que estén en la misma altura y ubicación del pentagrama. Se coloca la primera nota donde empieza esta ligadura y se suma el valor de las restantes. Hay varios tipos de ligaduras; por ejemplo, las expresivas o las conjuntivas.
Leer un pentagrama a primera vista
Cuando se lee una partitura a simple vista se dice que se ha hecho una repentización. Saber dominar esto hará que puedas interpretar una melodía con solo echar un vistazo a una partitura.
Lo cierto es que, aunque al principio pueda parecerlo, esto no es algo que solo está al alcance de los músicos más consumados. Está demostrado que también los aficionados son capaces de dominarlo. Como casi todo, es cuestión de estudio y práctica.
Algo que significa «un paso más allá» es la capacidad para ver cualquier partitura de una pieza que no se había visto hasta el momento y «escuchar» al momento la tonalidad de las armonías, melodías, timbres, etcétera. O sea, de todos los sonidos de la pieza.
Algunas partituras para flauta
Para terminar, ahí van algunas partituras para que puedas practicar:
La mítica canción de la banda sonora de la película «El mago de oz» y popularizada por su protagonista: Judy Garland. Hay muchísimas versiones de esta canción.
El conocidísimo tema del grupo sueco ABBA, popularizado también por el musical del mismo título hecho a base de canciones del mismo.
Por si quieres darle tu toque personal a tu próxima Semana Santa (y a las que vengan), aquí tienes esta saeta.
Un tema muy socorrido y popular que seguro tendrás ocasión de tocar.
Esperamos haberte ayudado a conocer lo que necesitabas saber sobre las partituras para flauta. Ojalá que también te sean útiles las partituras que hemos seleccionado para ti.